A un ganador se le reconoce cuando logra llegar a su meta, cuando supera la infinidad de obstáculos que se le presentan en su camino y cuando demuestra que es el mejor por superar a sus adversarios, pero detrás de eso siempre existen muchas situaciones que lo impulsan a lograr el éxito; obedecer reglas y lineamientos que en muchas ocasiones van de la mano con la persistencia, constancia y tenacidad; disciplina, amor propio, carácter y fuerza para resolver las dificultades son muchas de las cualidades necesarias para llegar u obtener a un fin, en algunos casos también ayuda la suerte; pero, uno pensará que se necesita ser un súper hombre o maquina para lograrlo y no, los héroes en todos los casos, vemos que son personas normales y comunes.
Ayrton Senna es y fue un hombre que le dejo y dio todo y mucho al automovilismo profesional, no solo fue un corredor más de F1 y campeón, fue un luchador incansable que no se conformaba con llegar a la meta y recibir el reconocimiento, siempre busco mejorar y mostrar que el hombre puede trabajar en conjunto con la maquina; demostrar que el amor y la entrega a la profesión lo es todo.
Senna fue un outsider en las pistas, lucho contra el sistema y eso le causo varios enemigos en el tiempo que compitió, sus rebases, cierres, fuerza y velocidad fueron inigualables e irrepetible su competencia contra Alain Prost; el recuerdo y el trágico destino que tuvo quedaran en el recuerdo de los fans de la velocidad.
Senna, el hombre que desafío a todos, incluso a la velocidad.
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